Asclepio o Esculapio

Asclepio o Esculapio

Esculapio, conocido como Asclepio en la mitología griega, es venerado como el dios de la medicina. Hijo de Apolo, dios de la sanación, la luz y la verdad, y de la ninfa Coronis, Esculapio se destacó desde su nacimiento por su extraordinaria relación con la medicina. Su nacimiento está envuelto en tragedia y milagro: Artemisa, la hermana melliza de Apolo, mató a Coronis por infidelidad, pero Esculapio fue rescatado milagrosamente del vientre de su madre, ya sea por Apolo o por Hermes.

Este dramático comienzo en la vida de Esculapio prefiguraba su destino extraordinario. Educado por el centauro Quirón, conocido por su sabiduría y habilidad en medicina y quien había educado a muchos dioses y héroes, Esculapio aprendió el arte de la medicina. Su herencia divina como hijo de Apolo le otorgó un don natural para sanar, elevando su habilidad médica más allá de los conocimientos humanos.

mercurio hermes
Hermes o Mercurio

Adoración y santuarios

La adoración de Esculapio se extendió por toda Grecia, siendo especialmente prominente en Epidaurus (Epidauro) en el Peloponeso, un centro conocido por su impresionante santuario dedicado al dios de la medicina. Los peregrinos acudían a estos santuarios, incluyendo el notable Asclepium en la isla de Cos, en busca de curas para sus enfermedades. En estos lugares sagrados, Esculapio era honrado y se realizaban rituales de sanación, destacando su importancia en el mundo antiguo no solo como una figura mitológica, sino como un símbolo de esperanza y sanación para los enfermos.

La serpiente, dedicada a Esculapio, desempeñaba un papel crucial en su culto y simbolismo. Esta representación de la serpiente enroscada en los instrumentos médicos es aún hoy un símbolo internacional de la medicina y la farmacia. La conexión de la serpiente con Esculapio podría estar relacionada con su habilidad para mudar su piel y rejuvenecer, un proceso que simbolizaba la renovación y el poder curativo.

El legado familiar y el destino de Esculapio

Se casó con Epione, con quien tuvo dos hijos que desempeñaron un papel activo en la Guerra de Troya, atendiendo a los compañeros heridos en batalla. A pesar de su divinidad y sus asombrosas habilidades para sanar y resucitar a los muertos, Esculapio no era inmortal. Su habilidad para trascender la muerte y devolver la vida a otros fue vista como una presunción ante los ojos de Zeus, quien lo atacó con un rayo divino como castigo.

Tras su muerte, Apolo honró la memoria de su hijo colocándolo en el firmamento como la constelación de Ophiucus (Ofiuco), el portador de la serpiente, situada entre Sagitario y Escorpio. Esta constelación sirve como un recordatorio eterno del legado y la influencia de Esculapio en la medicina y la sanación.

Cómo citarnos
Ramírez, Silvia y Torres, Roberto (2015, 15 de septiembre). Asclepio o Esculapio. Mitos y Relatos. https://mitosyrelatos.com/europa/mitologia-griega-romana/asclepio-esculapio